"Regresa" Hispanoscope. Y lo hará muy pronto con las entregas 29, 30 y 31 de la colección y, posiblemente, con algún título más este mismo año. Hay quien opina que atreverse a mantener con regularidad una colección dedicada al cine español como esta solo puede hacerlo una editorial con tendencia a la desaparición, por no decir al suicidio. Puede que algo de razón tenga. La atracción y la pasión por el riesgo del equilibrista sin red nos puede. Desde que iniciamos la andadura, no ya de Hispanoscope, sino de Shangrila en su conjunto, fuimos conscientes que por línea de edición, antes o algo después, el proyecto global de publicación en papel estaba llamado a desaparecer. El caso es que seguimos pensando lo mismo, a pesar de que el proceso que desemboca en tal suceso no está siendo tan rápido y sí bastante más lento: sin alardes llevamos suicidándonos casi quince años. Eso sí, cuando por el motivo que sea llegue el momento, más pronto o un poco más tarde, lo haremos fieles a nosotros mismos: sin ruido, fuera de cuadro.
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