Instrucciones para sacar del armario a (o salir del armario con) los clásicos de la literatura. Fassbinder y la adaptación cinematográfica de Berlín Alexanderplatz de Alfred Döblin
Con Berlin Alexanderplatz en la cabeza, en la carne y en el cuerpo
En una famosa nota de 1980, “Die Städte des Menschen und seine Seele” (recopilada luego en La anarquía de la imaginación, 2002), antes del estreno de su versión televisiva/cinematográfica Berlin Alexanderplatz (1), Fassbinder da cuenta de la importancia que la novela de Alfred Döblin tuvo no solo para su obra teatral y cinematográfica, sino para su vida:
No solo hubiera dejado escapar uno de mis contactos más emocionantes e interesantes con una obra de arte, no, también mi vida −y creo que sé lo que digo−, seguro que no en su totalidad pero sí en algunos, muchos, quizá sus aspectos más decisivos, tal como soy capaz de juzgarlo hoy en perspectiva, hubiera transcurrido de forma diferente a como lo ha hecho con Berlin Alexanderplatz, de Döblin, en la cabeza, en la carne, en el cuerpo entero, y en el alma (Fassbinder, 2002: 195)
1. Me refiero a Berlin Alexanderplatz (1980) de Rainer Werner Fassbinder como un texto audiovisual que se puede pensar como cinematográfico y también como televisivo. Berlin Alexanderplatz se estrena en la televisión (como una miniserie en el prime-time) pero se enuncia a sí misma como “einen Film in 13 Teilen und einem Epilog” [“una película en 13 capítulos y un epílogo”]. Se trata de una coproducción entre el Bavaria Atelier y la televisión italiana (RAI) y es para ese momento la serie más costosa que se había realizado para televisión. Sobre los detalles de su televisación y la recepción del público y la crítica, cf. el capítulo 7 de Shattuc (1995).
¿Cómo es tener en la cabeza, en la carne y en el cuerpo a Berlin Alexanderplatz de Döblin? La novela Berlin Alexanderplatz (1929) de Döblin es, sin duda, la influencia literaria más importante no solo para la obra de Rainer Werner Fassbinder, sino también −según afirma él mismo− para su vida. En la nota antes mencionada de 1980, Fassbinder explica qué es lo que lo cautivó de la novela y, con ello, propone su propia versión, su interpretación, en definitiva, la lectura que él hizo de joven de la novela de Döblin y la que le cambió la vida:
Berlin Alexanderplatz no solo me ayudó en algo así como un proceso de maduración ética, no, también me ayudó a vivir (…), pues por aquel entonces leí la novela de Döblin (y sin duda la simplifiqué ciñéndola demasiado a mis propios problemas e interrogantes) como la historia de dos hombres que fracasan en su corta vida sobre la Tierra porque no tienen la posibilidad de ser bastante valientes para reconocer, y no digamos admitir, que se gustan, que se quieren de alguna manera, que hay algo misterioso que les une más de lo que se permite generalmente entre hombres (Fassbinder, 2002: 196).
Me interesa pensar el vínculo intermedial entre la novela de Alfred Döblin Berlin Alexanderplatz y la adaptación audiovisual al formato de miniserie que realiza Fassbinder en 1980 desde una perspectiva sexo-disidente, centrándome sobre todo en las relaciones que se establecen entre el protagonista y su antagonista, las que pueden ser pensadas a partir de los conceptos de Homosociabilidad (Sedgwick, 1998), melancolía de género (Butler, 2001, 2002 y 2007) y terror anal (Preciado, 2009) [...]