DE BUSTER KEATON A MICHAEL SNOW
El cine es una invención post-mortem
El cine es una invención post-mortem
Érik Bullot
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La région centrale (rodaje), Michael Snow, 1969
En su primera aparición en cine en el filme The Butcher Boy (Roscoe Arbuckle, 1917), Buster Keaton impactó a los espectadores por la discreción impecable de su actuación. Ya sea que recibiera en plena cara el golpe de un saco de harina o debiera luchar con la mala fortuna insistente por demás de la melaza caída en su sombrero, ningún altercado con la materia hacía mella en la precisión mesurada de sus gestos. Venido del music-hall, donde servía de proyectil a su padre, que lo lanzaba a través de escenario como una bala, Keaton no dejará de trabajar esa discreción al desarrollar un principio de construcción dramática, formal y plástico, cuyo carácter geométrico aún continúa fascinándonos. El efecto burlesco reside menos en los azares de la materia que en el suspenso lógico de una trayectoria o el despliegue retorcido de las coordenadas del espacio. Sin embargo, la materia no desaparece, sino que está capturada en la red de un medio físico que multiplica sus curvas y trayectos según las leyes de una balística general inesperada. El espíritu de Keaton es de orden geométrico, tal como lo evidencia, por otra parte, su pasión, tanto en el cine como en la vida, por el bricolaje. “Construí un gallinero y un ferrocarril en miniatura que ofrece bebidas y bocadillos a los invitados dispersos en torno a la piscina”, escribe en sus memorias. Organizar porciones del espacio, proceder al cambio de agujas en las líneas de un ferrocarril, construir una casa, dirigir un vehículo, son actividades que le gustan, y es mediante el ejercicio de una reconstrucción paciente y rigurosa del espacio que el genio keatoniano alcanza su equilibrio. Tal como destacaba ya Éric Rohmer en su ensayo “El cine, arte del espacio”, una “obsesión espacial” parece guiar la puesta en escena de Keaton. He aquí un cineasta que extrajo del puro despliegue lógico y contrariado de las reglas espaciales el máximo de emoción burlesca. ¿Cómo se opera este hábil desmontaje? (...)
Fragmento de "De Buster Keaton a Michael Snow"
en El cine es una invención post-mortem, Érik Bullot
