En la especular soledad de su mismidad: Jane, Rachel y Botvid.
(Jane) La literatura de Fleur Jaeggy es una literatura de muerte. Su voz nace de la tumba, como una flor del mal, y envenena fatalmente a todo aquel que la toca, incluso si tan solo se trata de un roce. Cuando empiezas a leerla es como si osaras traspasar la verja que parece encerrar un encantado y nebuloso paisaje. Una vez en él, un aire gélido es lo primero que te recorre tu cuerpo, como un presagio. Como un mal presagio, como un repiqueteo de campanas llamando a difuntos. Todo te resulta fantasmagóricamente onírico, como un mal sueño, como una pesadilla con los ojos abiertos. Entonces te das cuenta de tu error. Lo que parecía que iba a ser un recoleto vergel, donde podrías sentarte en un banco para contemplar atardeceres crepusculares y ver pasar el lento discurrir de unos solitarios y callados paseantes de tarde de domingo, se revela como algo siniestramente diferente. Comprendes entonces que el lugar en el que te has refugiado no es ese espacio apacible. Estás en un cementerio. Y los paseantes que desfilan ante ti no son personas vivas sino muertos, seres ignotos que salen de sus tumbas para enfrentarse a sus recuerdos una vez más, para convertirte a ti mismo en un jirón de su memoria fallecida. (...)
El ángel de la guarda y Fleur Jaeggy, una aproximación
Nacho Cagiga
Nacho Cagiga
Fleur Jaeggy
Temblor de lenguaje
Temblor de lenguaje
VV.AA.
Swann libros 2
14x19cm. - 178 páginas (14 a color)
14x19cm. - 178 páginas (14 a color)
ISBN: 978-84-941753-5-0
PVP: 18.00 euros
PVP: 18.00 euros