La clase, Laurent Cantet, 2008
La educación necesita una mística; una espiritualidad, una motivación
profunda, estimuladora de valores. Sin ellas queda reducida a un armazón de
normas, apremios y deberes artificiales; a un cuerpo sin alma. Y esa mística es la sensibilidad por el valor, nobleza y vocación de un ser humano.
Francisco Galende