PRÓLOGO
Imanol Zumalde
Imanol Zumalde
El libro que tienes entre manos es el síntoma de una emancipación. A tal extremo que un trabajo de sus características sería prácticamente imposible hace quince o veinte años, cuando los tenaces estudiosos que se empeñaron en rehabilitar el cine español se veían obligados a encabezar sus investigaciones reivindicando el interés y la valía de un objeto de estudio oculto hasta escasas fechas tras un telón de acero de prejuicio ideológico, descrédito y mala praxis historiográfica. Hoy, cuando el cine español conforma un campo de estudio indiscutible y plenamente consolidado que se sostiene sobre una bibliografía amplia y diversa, es factible (y editorialmente viable) un trabajo ambicioso y audaz como el de Nekane Zubiaur que busca trascender los estandarizados parámetros del estudio cinematográfico al uso sintetizando los mejores hallazgos metodológicos de esa forma, por aquel entonces novedosa, de hacer historia/memoria del cine español. De ahí que, volviendo a la frase inicial, este libro ilustre virtuosamente el afianzamiento del legado cinematográfico hispano como objeto de estudio de la Academia así como la rentabilidad heurística de un modo de trabajo poco convencional.
Y todo ello a propósito de la exhumación de un cadáver, uno de los más notables del Panteón cinematográfico español y caso modélico de esa categoría de los injustamente olvidados que hasta este preciso instante carecía de un estudio monográfico tan completo y esclarecedor que glosa su figura irrepetible y evalúa globalmente su obra sacando a la luz las razones (textuales) de su descollante excepcionalidad. Porque Manuel Mur Oti no es un olvidado cualquiera, sino un cineasta vigoroso que, como denota el apelativo que le atribuyeron sus coetáneos (“el Orson Welles español”), no sólo fue una figura estelar en el panorama cinematográfico hispano de los años cincuenta del pasado siglo, sino que, impelido por una irreprimible pulsión autoral, compuso una filmografía sin parangón por estos pagos dotada de una escritura enfática, musculosa y reconocible casi al primer golpe de vista.
Si para medirse con este autor y todas sus intrincadas circunstancias Nekane Zubiaur maneja elementos históricos y analíticos con una destreza fuera de lo común, el lector comprobará de inmediato que el mayor mérito (y riesgo) de su trabajo estriba en la disposición de esos materiales. En efecto, frente al formato de corte narrativo en el que se sustancian mayoritariamente este tipo de abordajes monográficos donde el relato de la peripecia profesional del realizador se yuxtapone y alterna sin solución de continuidad con la evaluación crítica de sus películas, nuestra investigadora ha optado por separar taxativamente la exposición de ambas cuestiones en dos grandes apartados: uno primero que se ocupa de levantar acta de la actividad vital y profesional de Manuel Mur Oti, y otro segundo que, libre de esas cuitas y menudencias biográficas, describe con minucia no sólo la casuística y funcionamiento particular de las películas que llevan su firma, sino el complejo sistema que, a fuerza de incidir en los mismos temas y soluciones formales, conforman unas obras cortadas (algunas más que otras) por el mismo patrón. Esta fórmula, que aquí alcanza una operatividad y resultados que a buen seguro satisfarán hasta al más suspicaz, ya fue esbozada embrionariamente para el escrutinio de películas concretas en la Antología Crítica del cine español 1906-1995 (Cátedra/Filmoteca Española, 1997) que pilotó Julio Pérez Perucha, estudio que dio carta de naturaleza a esta nueva manera de abordar y sopesar el objeto “cine español” que, andando los años, ha hecho posible este libro. Nekane Zubiaur, que por su juventud no pudo participar en aquel proyecto, eleva la apuesta desarrollando la fórmula al aplicarla a escala de la filmografía completa de un cineasta.
De manera que, sin dejar de ser un trabajo unitario atravesado por soterradas referencias cruzadas, este volumen exhibe bien a las claras las dos vertientes científicas que combina su autora: la del historiador-detective que escudriña las fuentes documentales y hemerográficas de archivos y bibliotecas para poner en limpio hasta en sus mínimos detalles la hoja de servicios de un cineasta; y la del analista textual que desmenuza pacientemente las películas con objeto de esclarecer de qué manera concreta esos artefactos fílmicos combinan imágenes y sonidos de cara a producir determinados efectos de sentido. Dado que el libro se defiende solo con sobrada elocuencia, creo que está de más que yo califique el fruto de este desafío metodológico.
Cuando oigo a alguno de mis colegas decir que el cine de Pedro Almodóvar es material fungible, que dentro de veinte años nadie se acordará de él, pienso inevitablemente en Manuel Mur Oti. Este trabajo no aclara, ni tendría por qué hacerlo, las razones por las que un cineasta que tanto predicamento concitó hace más de medio siglo es hoy un perfecto desconocido, pero constituye toda una advertencia para navegantes.
Y todo ello a propósito de la exhumación de un cadáver, uno de los más notables del Panteón cinematográfico español y caso modélico de esa categoría de los injustamente olvidados que hasta este preciso instante carecía de un estudio monográfico tan completo y esclarecedor que glosa su figura irrepetible y evalúa globalmente su obra sacando a la luz las razones (textuales) de su descollante excepcionalidad. Porque Manuel Mur Oti no es un olvidado cualquiera, sino un cineasta vigoroso que, como denota el apelativo que le atribuyeron sus coetáneos (“el Orson Welles español”), no sólo fue una figura estelar en el panorama cinematográfico hispano de los años cincuenta del pasado siglo, sino que, impelido por una irreprimible pulsión autoral, compuso una filmografía sin parangón por estos pagos dotada de una escritura enfática, musculosa y reconocible casi al primer golpe de vista.
Si para medirse con este autor y todas sus intrincadas circunstancias Nekane Zubiaur maneja elementos históricos y analíticos con una destreza fuera de lo común, el lector comprobará de inmediato que el mayor mérito (y riesgo) de su trabajo estriba en la disposición de esos materiales. En efecto, frente al formato de corte narrativo en el que se sustancian mayoritariamente este tipo de abordajes monográficos donde el relato de la peripecia profesional del realizador se yuxtapone y alterna sin solución de continuidad con la evaluación crítica de sus películas, nuestra investigadora ha optado por separar taxativamente la exposición de ambas cuestiones en dos grandes apartados: uno primero que se ocupa de levantar acta de la actividad vital y profesional de Manuel Mur Oti, y otro segundo que, libre de esas cuitas y menudencias biográficas, describe con minucia no sólo la casuística y funcionamiento particular de las películas que llevan su firma, sino el complejo sistema que, a fuerza de incidir en los mismos temas y soluciones formales, conforman unas obras cortadas (algunas más que otras) por el mismo patrón. Esta fórmula, que aquí alcanza una operatividad y resultados que a buen seguro satisfarán hasta al más suspicaz, ya fue esbozada embrionariamente para el escrutinio de películas concretas en la Antología Crítica del cine español 1906-1995 (Cátedra/Filmoteca Española, 1997) que pilotó Julio Pérez Perucha, estudio que dio carta de naturaleza a esta nueva manera de abordar y sopesar el objeto “cine español” que, andando los años, ha hecho posible este libro. Nekane Zubiaur, que por su juventud no pudo participar en aquel proyecto, eleva la apuesta desarrollando la fórmula al aplicarla a escala de la filmografía completa de un cineasta.
De manera que, sin dejar de ser un trabajo unitario atravesado por soterradas referencias cruzadas, este volumen exhibe bien a las claras las dos vertientes científicas que combina su autora: la del historiador-detective que escudriña las fuentes documentales y hemerográficas de archivos y bibliotecas para poner en limpio hasta en sus mínimos detalles la hoja de servicios de un cineasta; y la del analista textual que desmenuza pacientemente las películas con objeto de esclarecer de qué manera concreta esos artefactos fílmicos combinan imágenes y sonidos de cara a producir determinados efectos de sentido. Dado que el libro se defiende solo con sobrada elocuencia, creo que está de más que yo califique el fruto de este desafío metodológico.
Cuando oigo a alguno de mis colegas decir que el cine de Pedro Almodóvar es material fungible, que dentro de veinte años nadie se acordará de él, pienso inevitablemente en Manuel Mur Oti. Este trabajo no aclara, ni tendría por qué hacerlo, las razones por las que un cineasta que tanto predicamento concitó hace más de medio siglo es hoy un perfecto desconocido, pero constituye toda una advertencia para navegantes.
ANATOMÍA DE UN CINEASTA PASIONAL
El cine de Manuel Mur Oti
NEKANE E. ZUBIAUR GOROZIKA
El cine de Manuel Mur Oti
NEKANE E. ZUBIAUR GOROZIKA
Hispanoscope libros 2
17x25cm. - 600 páginas
17x25cm. - 600 páginas
ISBN: 978-84-941753-1-2
PVP: 26.00 euros
PVP: 26.00 euros